sábado, 26 de diciembre de 2009

I VECCHI CLAUDIO BAGLIONI

Uno de mis autores italianos preferidos es Claudio Baglioni, muchos de vosotros no le conocereis, incluso no será vuestro tipo de música pero es uno de los grandes en Italia. En esta canción demustra además una sensibilidad especial por una parte muy importante de nuestra sociedad que son la gente mayor.

http://www.youtube.com/watch?v=6KhX_XjyGgQ

Por lo general, todos deberíamos de llegar a mayores pero mientras tanto olvidamos que ellos nos han dado todo.De ellos aprendemos el mundo de la fantasía cuando somos pequeños y los cuentos de los abuelos son nuestro refugio mágico. Son también los que nos permiten los caprichos que los padres no nos dan y de los que aprendemos miles de cosas con sus refranes, sus consejos y su experiencia. Desgraciadamente la sociedad en ocasiones no les reconoce el mérito que se merecen y la mayoría de las veces ni tan siquiera se lo reconoce su familia.

Es hora de que eso cambie y nos les" aparquemos" sino que les cuidemos y mimemos como han hecho con nosotros. Para mí, mis abuelos fueron muy importantes y de ellos aprendí mucho.Echo de menos poder seguir disfrutando de ellos así que aquellos que podéís hacerlo no lo dudeís, merece la pena. Quiero aprovechar para felicitar a todos las Navidades, aquellos que creen para celebren la Venida del Niño Jesús y para los que no creen para que disfruten de unos días de fiestas.Feliz Navidad a todos.

I vecchi sulle panchine dei giardini
succhiano fili d'aria a un vento di ricordi
il segno del cappello sulle teste da pulcini
i vecchi mezzi ciechi i vecchi mezzi sordi...

I vecchi che si addannano alle bocce mattine
lucide di festa che si può dormire gli occhiali
per vederci da vicino a misurar
le gocce per una malattia difficile da dire...

I vecchi tosse secca che non dormono
di notte seduti in pizzo a un letto a riposare
la stanchezza si mangiano i sospiri
e un po' di mele cotte
i vecchi senza un corpo
i vecchi senza una carezza...

I vecchi un po' contadini che nel cielo
sperano e temono il cielo
voci bruciate dal fumo
e dai grappini di un'osteria...

I vecchi vecchie canaglie sempre pieni
di sputi e consigli i vecchi senza più
figli e questi figli che non chiamano mai...

I vecchi che portano il mangiare
per i gatti e come i gatti frugano
tra i rifiuti le ossa piene di rumori
e smorfie e versi un po' da matti
i vecchi che non sono mai cresciuti...


Los viejos en las bancos de los jardines chupan soplos de aire y un viento de recuerdos la señal del sombrero en sus cabezas de pollitos los viejos medio ciegos los viejos medio sordos los viejos se habitúan a la petanca mañanas lúcidas de fiesta en las que pueden dormir las gafas para ver de cerca al medir las gotas para una enfermedad difícil de explicar los viejos y su tos seca que no les deja dormir de noche sentados en la esquina de la cama para reposar del cansancio se comen los suspiros y alguna desilusión los viejos sin un cuerpo, los viejos sin una caricia los viejos un poco aldeanos que del cielo esperan y al cielo temen voces quemadas por el humo de los aguardientes de una taberna los viejos, viejos pillines siempre llenos de gargajos y consejos los viejos ya sin los hijos y estos hijos que no llaman jamás los viejos que llevan la comida para los gatos y, como los gatos, rebuscan entre los deshechos los huesos llenos de chasquidos y gestos y versos un poco de locos los viejos que nunca han crecido los viejos alma blanca de cal a contraluz ojos aguados por la lluvia de la vida los viejos solos como los palos de la luz y deber vivir hasta la muerte qué fatiga los viejos corazones de trapo un viejo perro y una pena en la correa confusos tropiezan de ternura y refunfuñando se van yendo los viejos envejecen despacio con el pequeño sobre de la compra aquéllos que vuelven a la iglesia, dejan fuera las blasfemias y hacen la paz con Dios. Los viejos pobres estrellas los viejos pobres ropas desabrochadas mejillas de esposas enrojecidas por mal de amores y por nostalgia los viejos siempre tras los pies encerrados en la cocina por si aparece alguien los viejos a los que no quiere nadie los viejos para tirarlos pero los viejos, los viejos... si tuviese un coche en el que cupiesen muchos me gustaría un día llevarlos al mar enrollarles los pantalones y llevármelos a todos en brazos la sillita plegable...hoy se nos vuela...y cuidado de no sudar.
Publicado por Bárbara

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