sábado, 5 de diciembre de 2009

Que mal se vive cojo

25 Noviembre 2009Posted by porallí

Llevo tres días cojo y está siendo bastante angustiosa mi incapacidad para poder salir a la calle y hacer algo más que tirarme los días leyendo blogs, noticias, artículos y viendo alguna peli por internet; hablar por teléfono con alguien; llegar y ver como mi novia se pone nerviosa por no verme en condiciones. Cuando uno esta cojo todo se para y no puedes hacer nada para remediarlo hasta que tu tobillo, que la última vez que lo viste tenía el tamaño de un pomelo, no te deje pisar con mediana facilidad.

Mas no todo son perjuicios, también tiene algún beneficio. Como estoy de baja no tengo que ir al curro, aunque el jefe me llame alguna vez para preguntarme por el listado de tal o cual reunión, si he mandado los emails. Todo porque tengo acceso a mi ordenador desde cualquier sitio, ¡cuánta tecnología! Afortunadamente para mi organización, este sistema permite que todo trabajador se conecte esté donde esté, beneficio notable para aquellos puestos que viajan mucho. Yo es la primera vez que lo utilizaba, ya que salvo alguna conferencia no hacía labores fuera del horario que requirieran el acceso a mi sobremesa.

Pero el mayor beneficio que tiene estar de baja es poder dormir. Desde hace varios meses, en los que trabajo siete días a la semana, no suelo poder permitirme el lujo de dormir más de ocho horas algún día, estando normalmente en torno a las siete. Con esta semana pudiendo levantarme a las 11 podré recuperar un poco las pilas para atarme de nuevo la manta de ser árbitro, currante y estudiante a la vez.

Espero que la semana forzada de baja me sirva para ponerme al día en algún texto que tenía retrasado aunque algún profesor no creo que vea con buenos ojos mi ausencia reiterada, más si tenemos en cuenta que la semana pasada tampoco pude acudir a las clases del lunes y martes por fuerza del trabajo. Aun así, tengo que reconocer que esta lesión de tobillo está siendo la más benigna que he tenido hasta ahora. La inyección que me metió en “el culete” la enfermera me han dicho que hace efecto una semana y me está ayudando a soportar la inflamación. Espero que siga así hasta el viernes, día en que me quito la venda.

Para reirnos un poco, un videos visto hasta la estenuación pero que nos enseña cuan débiles son nuestras articulaciones.

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