Efecto mariposa

Todo está interconectado. Y más aún en estos tiempos de globalización, cuando las comunicaciones logran alcanzar cotas inimaginables de desarrollo. En la actual situación mundial cada vez puede ser más creíble la teoría del efecto mariposa, aquella que asegura que el vuelo de una mariposa en Oriente puede producir una gran tormenta en Occidente. Nunca esta teoría estuvo más próxima a la realidad.

Por supuesto, la economía no escapa a esta dinámica y la interconexión en el ámbito económico se hace más estrecha todavía. En este contexto globalizado el sistema económico mundial se encuentra formado por una gran y compleja madeja de relaciones, cuyos componentes no es posible separar ni analizar de forma aislada.

Por supuesto, esta conexión permanente puede apreciarse en lo cotidiano, mirando un informativo en televisión o leyendo cualquier periódico. La pasada semana se dio a conocer el nombre de la persona galardonada con el Premio Nobel de Economía 2009. Elinor Ostrom es mujer y economista, pero su principal reconocimiento se debe a sus investigaciones, en donde recoge postulados económicos incómodos para muchos sectores económicos. La defensa de la propiedad pública (o estatal) y la apuesta por un desarrollo sostenible marcan su trayectoria.
Sin embargo, estos valores de una economía justa y sustentable no parecen ser compartidos por todos. En tiempos de crisis se hace difícil seguir defendiendo la necesidad de la propiedad pública, tan amenazada por acusaciones de ineficacia y corrupción. Y menos aún cuando la venta de este tipo de propiedad se justifica con frecuencia por un recorte de la deuda pública. Numerosos gobiernos, como el de Gordon Brown en Gran Bretaña, siguen recurriendo a la privatización de propiedades estatales para intentar reducir el déficit público, medida neoliberal que adelgazará al estado por enésima vez. Pero, tampoco es fácil apostar de manera clara por un crecimiento sostenible y respetuoso con nuestro medio ambiente cuando el desarrollo económico mundial sigue dependiendo íntimamente de energías tan contaminantes como el petróleo.

El petróleo sigue siendo moviendo la economía mundial y su valor sigue determinando contundentemente los precios del mercado. La variación de precios es una de las principales influencias que afectan a las economías nacionales y más concretamente a las economías domésticas familias azotadas en muchos casos por la inflación y por otros efectos de la crisis económica.

La solución a esta profunda crisis económica no puede hallarse en viejas recetas que, en numerosas ocasiones, han sido responsables de la actual situación económica. Los trabajadores siguen sufriendo los devastadores efectos de esta crisis y se movilizan por conseguir una salida social a ella. Ejemplo de ello son las últimas protestas de los trabajadores argentinos en Buenos Aires, que logran colapsar de manera visible el centro de la capital.

Con un breve repaso como éste a algunas noticias de actualidad, comprobamos una vez más que todo está conectado, y más aún cuando de economía se trata. La mariposa sigue su vuelo.

Publicado por ahidalgo